viernes, 23 de octubre de 2009

Tema 3. Textos periodísticos y publicitarios.

Tema 3. Los textos periodísticos y los textos publicitarios.
TEXTOS PERIODÍSTICOS
1. Características generales.
Se trata de una variedad de comunicación que, junto con la publicitaria, posee mayor audiencia. El Periodismo o Información de actualidad tiene como fin específico la difusión objetiva de los acontecimientos que son noticia y la interpretación de dichos acontecimientos. Esta doble función del Periodismo (informar e interpretar la información) se resume en el mundo anglosajón mediante dos frases breves: “Facts are sacred; comments are free.” (los hechos son sagrados; los comentarios son libres).
En la actualidad, las Agencias de Información, a través de los reporteros (testigos de acontecimientos que son noticia) y los corresponsales (periodistas encargados de cubrir la información en una zona situada fuera de la sede del medio) son los agentes encargados de abastecer de información a los diferentes medios: Radio, TV y Prensa. Las principales agencias informativas son Reuter (U.K.), France Press (Francia), Tass (antigua URSS), Nueva China, Japan Press, United Press International (EEUU), CNN (EEUU). En España: Europa Press, Agencia Efe y Logos.
Los receptores de la información periodística son de naturaleza heterogénea, es decir, pertenecen a distintas clases sociales, distintas ideologías, distintas edades, distintos sexos, etc., y se encuentran dispersos, tanto en el espacio (cada uno consume la información donde le parece oportuno), como en el tiempo (y cuando le parece oportuno; por ejemplo, la prensa; e incluso la TV y la Radio, a través de los distintos espacios informativos: Hora 25, Informe Semanal, Los Reporteros, Telediarios, etc.).
2. Las Funciones del Lenguaje en la comunicación periodística.
Por su naturaleza, la función prioritaria de la comunicación periodística es la referencial o representativa. El Periodismo, hemos visto, tiene como finalidad la transmisión de una información de actualidad a la sociedad en general, finalidad que define su función social. Sin embargo, como corresponde también al Periodismo la interpretación de esa información (“the comments are free.”), puede hablarse, por consiguiente, del uso de la función expresiva, lo que permite al periodista manifestar sus propias opiniones y poner de relieve su propia ideología o la del medio para el que trabaja.
También se puede constatar la presencia de la función apelativa o conativa ya que los medios determinan en gran medida la configuración de la Opinión Pública. El estudio de la Opinión Pública corresponde a los Institutos de Opinión Publica, y su medición se realiza mediante sondeos y encuestas, como por ejemplo, las encuestas previas a unas elecciones sobre la intención de voto, o las encuestas sobre la credibilidad de un determinado miembro del gobierno.
3. Características del lenguaje periodístico.
Tres son las cualidades básicas del lenguaje periodístico:
1º: la concisión, que consiste en utilizar las palabras indispensables para expresar lo que se quiere decir. Con ello se consigue rapidez y vivacidad en el estilo (el diccionario de la R.A.E. define la concisión como “brevedad y economía de medios en el modo de expresar un concepto con exactitud”.
2º: la claridad: el texto debe entenderse en una primera lectura. El lector no debe verse obligado nunca a releer.
3º: la captación del lector: los hechos deben ser presentados de tal forma que capten la atención del receptor.
4. Los géneros periodísticos.
Precisamente la doble función del Periodismo (informar e interpretar la información) determina la clasificación de los textos periodísticos en dos grupos: géneros informativos y géneros interpretativos. Los géneros informativos tienen por finalidad la transmisión objetiva de la información y son: la noticia, el reportaje, la entrevista y la crónica. Los géneros interpretativos, como su nombre indica, interpretan la información, por lo que incluyen opiniones y comentarios; son: el artículo, el editorial, la columna o comentario y la crítica.
4.1. Géneros informativos:
1º: La noticia: es la narración de un hecho actual e inédito (no publicado anteriormente) que por su naturaleza interesa a un sector amplio del público.
Los factores que determinan la importancia de la noticia son ocho: la actualidad (la noticia posee más valor en la medida en que sea más reciente), la proximidad (interesa más un suceso cercano que otro similar pero ocurrido en un lugar más lejano), la rareza (un suceso puede convertirse en noticia por ser algo insólito), la importancia del protagonista (un deportista conocido, un político importante, un artista famoso, etc.), el conflicto (disturbios, enfrentamientos, guerras...), el suspense (se desconoce el desenlace: unas elecciones, un secuestro, un partido donde se juega la final...), la emoción (temas de interés humano que despiertan las emociones del lector: desgracias, catástrofes, sucesos violentos, etc.), y las consecuencias (trascendencia del hecho: descubrimientos científicos, decisiones políticas, económicas, etc.).
La estructura de la noticia adopta la forma de “pirámide invertida”, apareciendo la información más relevante al principio, y la de menor relevancia a continuación. y se compone de tres partes:
a) el titular: en letras grandes y en negrita, resume lo fundamental de la noticia.
b) la entradilla: también en letra negrita, pero más pequeña, donde se exponen los elementos más relevantes de la noticia.
c) El cuerpo de la noticia: donde se desarrollan otros aspectos más pormenorizados.
Las preguntas a las que debe responder toda noticia se conocen en el periodismo anglosajón como las seis “W”: “Who” (¿Quién?), “What” (¿Qué?), “When” (¿Cuándo?), “Where” (¿dónde?), “Why” (¿Por qué?) y “How” (¿Cómo?).
2º: El reportaje: información cuyos elementos son recogidos en el mismo lugar del acontecimiento. La visión del acontecimiento se presenta con mayor profundidad, y puede incluir documentación (acopio de datos) sobre el hecho; por ejemplo, “Los reporteros”, “Solidarios” y “El Club de las ideas” de Canal Sur, “Informe semanal” y “Documentos TV” de TVE.
3º: La entrevista: es un tipo particular de reportaje en el que el periodista somete a una persona a una serie de preguntas con el fin de obtener una información que interese al público.
4º: La crónica: texto periodístico narrado generalmente según el orden cronológico de los acontecimientos, en el que el periodista incluye una valoración de los hechos; es por tanto un género híbrido entre la información y la interpretación. Por ejemplo, el desarrollo de una huelga, la evolución de un conflicto bélico, acontecimientos deportivos, etc..
4.2. Géneros interpretativos.
1º: el artículo de opinión: texto interpretativo en el que el autor sostiene determinadas opiniones, desarrolla una idea o comenta un acontecimiento de interés general.
2º: El editorial: artículo de fondo de un medio de comunicación donde se expone el punto de vista del medio con respecto a determinados hechos de gran relevancia social, haciéndose eco de un estado de opinión o tratando de crearlo. El editorial no suele llevar firma, sino que representa la postura ideológica del medio donde aparece.
3º: La columna o comentario: texto periodístico a cargo de un periodista  o colaborardor habitual que consiste en un comentario sobre cualquier tema de actualidad, desde la política internacional hasta asuntos relacionados con personajes de la actualidad (políticos, artistas, deportistas, etc); suele ocupar el mismo espacio en la prensa escrita.
4º: La crítica: aparece en la sección cultural del medio, y es un tipo de texto interpretativo donde se valora la producción cultural. Generalmente está a cargo de personas especializadas en las diversas ramas de la cultura: cine, teatro, música, arte, toros, deportes....
5. Rasgos lingüísticos de los textos periodísticos.
5.1. Rasgos morfosintácticos.
1º) uso frecuente de la nominalización, es decir tansformación de verbos en sustantivos (“prevención” de prevenir, “presentación” de presentar, etc), para conseguir una mayor concisión. Ej. Presentación de la nueva campaña de la DGT para la prevención de los accidentes de tráfico.
2º) Uso de frases cortas en los titulares para conseguir también concisión. Ej. “Suben las hipotecas” o “Nadal a semifinales”.
3º) Ordenación intencionada de los elementos de una Oración para resaltar un elemento determinado. En una Oración llama más la atención el primer elemento que se nombra. Ej. Comparar “La Junta de Andalucía subvencionará la vía verde de Zaframagón” con “La vía verde de Zaframagón será subvencionada por la Junta de Andalucía”. Un caso muy frecuente de ordenación intencionada es el uso de la Oración Pasiva para destacar el Sujeto Paciente, como en el ejemplo anterior, o como en el siguiente: "El nuevo Ayuntamiento será construido en breve", en el que no se nombra el Complemento Agente ("por la empresa Dragados", por ejemplo.
4º) Uso del estilo directo, es decir, repetición de palabras textuales, para conseguir mayor credibilidad. Ej. El presidente del Gobierno declara: "el año que viene mejorará el empleo".
5º) Utilización de Oraciones Impersonales cuando interesa más la acción (el SV) que el protagonista de la acción (el SNSujeto). Ej. “Se incrementa el precio de los carburantes”, en lugar de “El gobierno incrementa el precio de los carburantes”.
6º) Utilización del Pretérito Perfecto Simple o Pretérito Indefinido para señalar puntualmente los acontecimientos. Ej. “Nadal ganó a Federer y se clasificó para la final”. A veces se emplea el presente histórico para dar a la noticia mayor inmediatez y actualidad. Ej. “Nadal gana a Federer y se clasifica para la final”.
5.2. Rasgos léxico-semánticos.
1º) uso de barbarismos o extranjerismos debido a la traducción rápida de noticias suministradas por agencias extranjeras. Ej. “Se produce over-booking en el aeropuerto de Londres.”, en lugar de “Se produce saturación de pasajeros…”. Un fenómeno espectacular de introducción de barbarismos en el español actual es Internet, de donde hemos tomado términos como chat, web, blog, e-mail, etc.
2º) Creación de neologismos o términos de nueva creación para hacer referencia a nuevas realidades. Ej. “Estamos asistiendo a una progresiva balcanización de Europa.”, o “movimiento antiglobalización”, o “mileurista” (persona que gana mil euros al mes), etc.
3º) Utilización de eufemismos para evitar el uso de un término que puede herir la sensibilidad de los receptores. Ej. “daños colaterales” en lugar de “víctimas inocentes”, “discapacitado” en lugar de “paralítico”, etc.
4º) Uso de tecnicismos o términos propios de los ámbitos profesionales o especializados pertenecientes a campos como la economía, la política, los deportes. Ej. “el Ibex 35”, “la reforma constitucional”, “ranking”, etc.
5º) Empleo frecuente de siglas y acrónimos. Ej. UE, EEUU, UNICEF, ONU, ONG, etc.
6º) Utilización de todo tipo de figuras retóricas propias del lenguaje literario: metáforas (“balcanización” en lugar de “conflicto nacionalista”), sinécdoques (“voces” en lugar de “personas”), personificaciones (“Cádiz” en lugar de “los gaditanos”), hipérboles (“los españoles no estamos de acuerdo” en lugar de “muchos españoles no estamos de acuerdo”), etc.
TEXTOS PUBLICITARIOS
1. La comunicación publicitaria.
Los mensajes publicitarios pretenden persuadir a los receptores para que modifiquen su conducta ya sea comprando un producto, utilizando determinados servicios (transportes, agencias de viajes) , adhiriéndonos a una determinada ideología (campañas electorales) o aceptando los consejos de las instituciones (normas de tráfico, cuidado de la salud, educación del consumidor).
2. Los elementos del mensaje publicitario.
- el mensaje publicitario consta de varias partes:
a) el “slogan”: es el lema publicitario que resume en una frase el motivo anunciado. Suele ser breve, atrayente y fácil de recordar. Ej. Geox respira (marca de zapatos).
b) La “marca”: es el nombre del producto. Es importante que sea atractivo y original, es decir, que suene bien y que no haya otro igual en el mercado.
c) El “logotipo”: es la representación icónica con el que identificamos a la empresa o institución.
d) El “texto”: es el conjunto de unidades lingüísticas que nos informa de las características del producto.
e) La “imagen”: que puede ser fija o en movimiento, según el medio, y que frecuentemente se convierte en protagonista del anuncio.
3. Las funciones del lenguaje en la Publicidad.
Las funciones del lenguaje que predominan en los textos publicitarios son las siguientes:
a) la función apelativa o conativa: es la más importante, pues la finalidad de la Publicidad -como se indicó en el primer apartado- es persuadir a los receptores para que modifiquen su conducta. Las demás funciones se utilizan también, pero siempre subordinadas a la apelativa.
b) La función poética o estética: pretende llamar la atención sobre la forma del mensaje, mediante el uso de los más variados recursos lingüísticos y literarios: metáforas, comparaciones, personificaciones, etc.
c) La función fática o de contacto: con ella se asegura que los mensajes capten poderosamente la atención de los receptores. Para ello se utilizan diversos mecanismos semiológicos, como el color, el tamaño de la letra, la música, las imágenes, etc.
d) La función referencial o representativa: se centra en la información sobre las características objetivas del producto o el servicio anunciado.
4. Los recursos lingüísticos en los textos publicitarios.
A continuación estudiaremos algunos recursos empleados en los textos publicitarios:
a) nivel fónico: los procedimientos más utilizados son los siguientes:
1º) rima: repetición de sonidos: Más Vital, el primer alimento prebiótico de Pascual (leche Pascual)
2º) aliteración: repetición de sonidos dentro de una misma frase: Ford Fiesta, fuerte o Bono bueno, Bono bus
3º) paronomasia: palabras semejantes: Más libros, más libres o Si de puros hablamos, puros habanos
4º) onomatopeya: : imitación de sonidos reales: Tónica Schhh…o Chup, chup…Avecrem
b) nivel morfosintáctico: los recursos empleados en este nivel tienen como finalidad conseguir brevedad y concisión en los eslóganes; veamos algunos ejemplos:
1º)  ausencia de núcleo verbal: Todos contra el fuego o Su regalo ahora (cosméticos Clinique)
2º) complementos del Nombre en Aposición: Lexus, la división de lujo de Toyota o Estola, un vino con estilo
3º) Oraciones Imperativas o Exhortativas: Busque, compare, y si encuentra algo mejor, cómprelo o Pilota tu equipo (Johnnie Walter)
4º)  Oraciones Exclamativas e Interrogativas: ¡Viva la gente sin alcohol! o ¿Preocupado por su seguridad?
5º) Uso de la 2ª persona: Porque tú lo vales (Loreal) o Tu ADSL de Yacom
6º)  el comparativo de superioridad: Omo lava más limpio y más blanco que cualquier otro jabón
7º)  el superlativo: Duracell, las pilas más duraderas o El más económico (cualquier producto)
c) nivel léxico-semántico:
1º)  uso de prefijos y sufijos cultos: biodegradable, extralargo, prebiótico, ultracómoda, Puntomatic, Neutrex, etc.
2º)  Uso de palabras griegas y latinas: Beta (vídeo), Omega (reloj), Rex (tabaco)
3º) Uso de extranjerismos: slip, spray, for man, the independent spirit (whisky Glenfiddich)
4º)  Presencia de tecnicismos: Elastina, melanina, prebiótico, colágeno, etc.
5º)  Juegos de palabras: Man Zana in córpore sano (manzanas Zana).

martes, 13 de octubre de 2009

Comentario de Texto


Comentario de texto: Presentación de la Gramática panhispánica
 (ABC, marzo de 2007)
(página 21 del libro de texto)

1.     La propiedad de la coherencia:

1º) la intención: tomando como punto de partida la presentación en Medellín de la Gramática panhispánica, en un acto presidido por los Reyes y por el presidente de Colombia, el editorial de ABC nos recuerda la importancia de nuestra lengua como vehículo cultural, no sólo en todo el mundo hispánico, sino también en los foros internacionales. Tomar conciencia de esta importancia sirve de base al equipo de redacción de ABC para exigir a todos, organismos institucionales y entidades privadas, un esfuerzo continuo para mantener el idioma español en el privilegiado lugar que le corresponde en la esfera internacional.

2º) la situación y el contexto: la situación -dónde y cuándo se emite el texto- viene dada por la publicación del texto en el periódico ABC en marzo de 2007. El contexto cultural al que pertenece el texto podríamos decir que es el mundo de la lengua y la cultura hispánicas y su proyección internacional. Dentro de este contexto hay una serie de elementos de primera importancia, cuyo conocimiento nos ayudan a situar el texto en su verdadera dimensión; así por ejemplo, el hecho de que la Asociación de Academias de La Lengua Española está formada por veintidós Academias que existen en el mundo; que el acto de presentación tuvo lugar en Medellín, la segunda ciudad en importancia de Colombia, por lo que el presidente de dicho país actuaba, como exige el protocolo, como anfitrión; que la Lengua Española es el idioma oficial en veintiún países, diecinueve de ellos pertenecientes a América Latina; que en Estados Unidos es el segundo idioma más hablado, después del inglés; que el Instituto Cervantes es la institución pública creada por el Estado Español para la difusión de la lengua y la cultura españolas, con más de setenta centros distribuidos por todo el mundo; y que corresponde al Estado, a través de sus instituciones, velar por su protección y expansión por el mundo.

3º) las funciones del lenguaje: tres son las funciones que resultan relevantes en el texto: la expresiva, la apelativa y la referencial. La función expresiva permite a los redactores del editorial expresar su opinión en cuanto a qué pautas o líneas se deben seguir para mantener el lugar de privilegio que ocupa nuestra lengua a nivel internacional. La función apelativa se hace patente a partir del segundo párrafo, en que se pide el esfuerzo de todos para velar por la presencia del español en los organismos internacionales, para evitar el rechazo en las comunidades en que existen lenguas cooficiales, o para pedir el refuerzo de las instituciones y la ampliación de los presupuestos destinados a la difusión del español en el mundo. La función referencial es indispensable en cualquier mensaje; puede decirse que si no hay función referencial, no se produce comunicación. En este caso, la función referencial pone en contacto el mensaje constituido por el texto y la realidad, o mejor, el conjunto de realidades al que hace referencia dicho texto: la presentación de la Gramática panhispánica, el trabajo del equipo del profesor Ignacio Bosque, la declaración del Rey durante la presentación, etc., etc.

4º) tipología textual y modalidad textual: se trata de un texto periodístico, concretamente de un editorial, artículo de fondo de una publicación periódica donde se expone el punto de vista del medio con respecto a determinados hechos de gran relevancia social. El editorial no suele llevar firma, sino que representa la postura ideológica del medio donde aparece.
         Las modalidades textuales son la exposición y la argumentación. La exposición consiste en la presentación de una serie de hechos objetivos, como son la aparición de la Gramática panhispánica, la labor del profesor Ignacio Bosque y de su equipo, o la creciente expansión de nuestra lengua en Estados Unidos. La argumentación se utiliza a partir del segundo párrafo en que se dan las distintas razones por las que el español debe ocupar un puesto relevante en los foros internacionales; así por ejemplo, el reto que supone encontrarnos en una sociedad en que la información y el conocimiento son requisitos indispensables para el progreso; o su obligada presencia en los organismos internacionales debido a su cualidad de segunda lengua en la comunicación universal. También es un ejemplo de argumentación afirmar que el apoyo de la Corona en la difusión del español está garantizado, ya que esta labor es consustancial a la política de Estado, y no depende de ningún gobierno vigente.

5º) la organización: todo texto posee una estructura externa, y al mismo tiempo una estructura interna. La estructura externa viene dada en este caso por los cuatro párrafos que forman el texto. En cuanto a la estructura interna, hay que localizar las ideas más relevantes del texto, y su relación con las demás. Si partimos de la base de que la intención de los autores es reclamar el esfuerzo de todos para mantener al español como lengua de relevancia internacional, entonces las ideas principales están en los párrafos  segundo y tercero. El primero lo que hace es subrayar la importancia del español como vehículo de cultura, y el cuarto lo que señala es la manera en que las instituciones garantizan esa labor y esfuerzo que se piden en los párrafos centrales.


2.     Los mecanismos de cohesión:

a) los recursos semánticos:

1º) la cohesión léxica: es evidente que los elementos léxicos de un texto mantienen distintos tipos de relación, que contribuyen a la cohesión o estrecha unión entre ellos. Ejemplos de sinonimia los encontramos en los términos “español”, “lengua” e “idioma” (lín.4); utilizar la expresión “nuestra lengua” (lín.3) por “español” es un caso de sinonimia léxica; así como los términos “español” y “lengua” e “idioma”  están en relación de hiponimia e hiperonimia respectivamente. Un ejemplo de antónimos lo tenemos en la línea 15, donde aparecen los términos “reconocimiento” y “rechazo”. Ejemplos de palabras derivadas las tenemos en los términos “vario” y “variedades”, ambos en la línea 6, o en “instituciones” (lín.17) e “institucional” (lín.25).

2º) la deixis: ejemplos de deixis anafórica los tenemos en el sintagma “esta gran obra” (lín.5) para hacer referencia a “la Gramática panhispánica” (lín.1); también existe anáfora en la expresión “su proyección” (lín.20) para referirse a la proyección del español. Un ejemplo del fenómeno contrario, la catáfora, lo encontramos en la línea 5, cuando se dice “Como afirmó Don Juan Carlos” señalando a lo que se dice después: “esta gran obra fortalece…”.

3º) la elipsis: el caso más frecuente de elipsis en un texto es el Sujeto elíptico, como sucede en la línea 8, donde el Sujeto de “dejan” es “Todos los países…”, que aparece al principio de la Oración; sin embargo, pueden darse otros casos que fácilmente pasan desapercibidos; así sucede en la línea 12, donde “la sociedad de la información” es también “(una sociedad) del conocimiento”; o por ejemplo, en la línea 17, donde se dice que “Es necesario reforzar las instituciones y (es necesario) ampliar los presupuestos…”; “Es necesario” funciona como Predicado Nominal no sólo del infinitivo “reforzar”, sino también del infinitivo “ampliar”.

4º) la progresión temática: estamos en un caso claro de progresión vinculada. El “esfuerzo continuo”, que se pide en los párrafos 2 y 3, tiene sentido una vez que ha quedado patente la importancia del español en el primer párrafo. El párrafo 4 nos viene a decir que “ese esfuerzo” está garantizado en el caso de las instituciones, como el Instituto Cervantes o la Corona, para quienes el fortalecimiento del idioma constituyen su razón de ser en el primer caso, y algo consustancial a la política de Estado en el segundo. Vemos, por consiguiente, que la información dada en los distintos párrafos está interrelacionada.

5º) las redes léxicas o campos semánticos: por el contenido del texto, llaman la atención todas las palabras que pertenecen al campo semántico, o isotopía -para utilizar el término técnico- del lenguaje verbal; pertenecen a este campo –también llamado red léxica- las palabras: Gramática panhispánica, Academias (de la Lengua), español, hablantes, lengua, mapa (del español), idioma, obra (por Gramática), variedades (lingüísticas), literatura, segunda lengua, comunicación universal, lenguas cooficiales, conferencias, reuniones e Instituto Cervantes.            

         b) los recursos sintácticos: son los mecanismos lingüísticos utilizados para relacionar las distintas partes de un texto. Esta función la realizan principalmente los conectores, llamados también nexos supraoracionales o marcadores del discurso. Se diferencian de los nexos oracionales en que estos últimos unen proposiciones dentro de una Oración Compuesta. Los conectores relacionan o conectan unidades superiores a una Oración; unen por tanto una Oración con otra, o un párrafo con otro u otros.
         En el texto podemos encontrar los siguientes conectores:
-         “además” (lín.9): de adición.
-         “Sin embargo” (lín.12): de oposición o contraste.
-         “Por otra parte” (lín.14): de adición y de ordenación.
-         “Al fin” (lín.17): de ordenación.
-         “Además” (lín.18): de adición.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Tema 2. El Modernismo y la Generación del 98.


Tema 2. El Modernismo y la Generación del 98




1. Etapas históricas del siglo XX.

A comienzos del siglo XX Europa vive una época de gran prosperidad económica. Junto al desarrollo de una opulenta clase burguesa surgen los primeros movimientos obreros nacidos a finales del siglo XIX representados por socialistas, comunistas y anarquistas. Después de la 1ª Guerra Mundial (1914-1918), Europa pierde la hegemonía que había venido ejerciendo durante siglos, y en su lugar emergen dos grandes potencias: Estados Unidos y Japón.

Los años que discurren entre la 1ª y la 2ª Guerra Mundial son denominados históricamente como período de entreguerras. Se producirá en 1917 la Revolución Rusa, que dará lugar al primer estado comunista. En 1929 el sistema capitalista sufre una profunda crisis evidenciada por el crack de la bolsa de Nueva York, lo que propiciará el nacimiento en Europa de las ideologías fascistas, representadas por Mussolini en Italia y Hitler en Alemania.

El afán expansionista del nacionalsocialismo alemán y del fascismo italiano provocará el comienzo de la 2ª Guerra mundial (1939-1945), cuyo resultado será la derrota de las potencias de eje, Alemania y Japón, y la división de los estados en dos bloques: el comunista y el capitalista.

El enfrentamiento entre ambos sistemas, el comunista soviético y el capitalista norteamericano, dará lugar al período de la Guerra Fría, que finalizará en 1989 con la caída del Muro de Berlín y la posterior disolución de la Unión Soviética en 1991, consolidándose de esta forma la sociedad de consumo, que caracterizará a la economía capitalista.

Finalizando el siglo XX, se producen dos fenómenos que transformarán profundamente las relaciones sociales: la globalización económica y la sociedad de la información surgida del desarrollo tecnológico. Ambos fenómenos siguen protagonizando los principales acontecimientos del mundo actual.



2. La Literatura Española del siglo XX.

La intensa conmoción que supuso la Guerra Civil (1936-1939) en la sociedad española determina la división de la vida cultural, y por tanto, de la Literatura, en dos períodos: el anterior a la guerra (1900-1939), y el posterior (1939 hasta la actualidad).

Los principales movimientos literarios que se desarrollan hasta 1939 son: el Modernismo, dentro del cual podemos situar a la Generación del 98, el Novecentismo o Generación del 14, y la Generación del 27.

Después de la Guerra Civil, las corrientes literarias que se suceden son numerosas, por lo que tradicionalmente se estudia la evolución de la Literatura Española a través de los géneros literarios: la narrativa posterior a 1939, la poesía o género lírico y el teatro o género dramático, pudiéndose establecer dos períodos: el correspondiente al régimen de Franco, y el iniciado a partir de la Restauración de la Monarquía en la figura del rey Juan Carlos I.


3. El Modernismo.

El Modernismo es un movimiento literario que nace en Hispanoamérica, iniciado por el poeta nicaragüense Rubén Darío en 1888 con la publicación de su obra Azul . El Modernismo encontrará su principal medio de expresión en la poesía. Se trata de una Literatura preocupada fundamentalmente por el aspecto estético, y su principal objetivo será, por tanto, la consecución de la belleza. La presencia de este poeta en España a comienzos de siglo permitirá la expansión del movimiento en España, y ejercerá su influencia en poetas como Juan Ramón Jiménez, los hermanos Machado, Manuel y Antonio, y Ramón del Valle-Inclán.

Dos son las corrientes literarias que influyen de manera decisiva en el Modernismo: el Parnasianismo y el Simbolismo, pertenecientes ambas a la Literatura francesa.

Del Parnasianismo los escritores modernistas toman los siguientes temas:

- el escapismo: el poeta se evade de la realidad, y se sitúa en espacios lejanos y exóticos donde abundan ninfas, centauros, caballeros y palacios medievales, jardines perfumados, cisnes y pavos reales, marfiles y piedras preciosas, etc.
- el cosmopolitismo: los modernistas consideran todos los lugares del mundo como su patria; aunque la capital favorita será París, símbolo del cosmopolitismo y de la bohemia.
- La angustia romántica: al igual que los románticos, los modernistas manifiestan a menudo en su poesía un sentimiento de tedio y de profunda melancolía; por ello, muestran una tendencia a los ambientes otoñales, a lo crepuscular, a la noche.

Del Simbolismo recogen el uso de los símbolos, que utilizan para expresar realidades espirituales que no tienen existencia en el mundo de lo sensible; así por ejemplo, Rubén Darío utiliza el cisne como símbolo que representa la aristocracia espiritual además de la elegancia exquisita; o Juan Ramón Jiménez, que representa su idea de la pureza en la poesía mediante una muchacha que se despoja de su túnica quedándose desnuda.


4. Rubén Darío.

El poeta nicaragüense Rubén Darío (1867-1916) es considerado como la figura cumbre del Modernismo y príncipe de las letras castellanas. Fue embajador de su país en París y Madrid. Viajero incansable. Durante su estancia en España ejerce una influencia decisiva en la poesía española, especialmente en Juan Ramón Jiménez, Valle-Inclán y Antonio y Manuel Machado.

Su poesía recibió la influencia de la poesía francesa, concretamente de los parnasianos como Leconte de Lisle, y de los simbolistas como Baudelaire, Verlaine y Rimbaud. El mismo Darío escribe: "El Modernismo no es otra cosa que el verso y la prosa castellanos pasados por el fino tamiz del buen verso y de la buena prosa franceses".

Sus obras fundamentales son: Azul... (1888), Prosas profanas y otros poemas (1896) y Cantos de vida y esperanza (1905). En Azul... considerado el libro inaugural del Modernismo hispanoamericano, recoge tanto relatos en prosa como poemas escritos con elegancia y sensualidad. La etapa de plenitud del Modernismo y de su obra poética la marca el libro Prosas profanas y otros poemas (1896) en donde emplea un tono preciosista de una fantasía refinada. En Cantos de vida y esperanza (1905) su poesía se vuelve más íntima y también más angustiada.

En prosa escribió algunos artículos aparecidos en la prensa de la época, y una novela autobiográfica, La vida de Rubén Darío escrita por él mismo (1915).


5. Juan Ramón Jiménez.

Nace en Moguer en 1881 y muere autoexiliado en Puerto Rico en 1958. Recibe el Premio Nobel de Literatura en 1956. Fue Juan Ramón Jiménez un poeta preocupado por la perfección formal hasta el punto de reelaborar sus propios poemas a lo largo de su vida. Era una persona de una sensibilidad excesiva, lo que le ocasionó frecuentes crisis nerviosas que le obligaban a permanecer en completo reposo, atendido siempre por su inseparable mujer Zenobia Camprubí. Su famoso libro de prosa poética Platero y yo (1914) es fruto de una temporada en que vive retirado en Moguer, alejado de la ajetreada vida madrileña.

El mismo Juan Ramón Jiménez divide su poesía en tres etapas:

- etapa sensitiva (1898-1915): sus primeros poemas reciben la influencia de Bécquer y los simbolistas franceses. Pertenecen a esta primera etapa La soledad sonora (1911), Poemas májicos y dolientes (1911; Juan Ramón utiliza siempre la grafía “j”) y Sonetos espirituales (1914).

- Etapa intelectual (1916-1936): escribe una poesía más conceptual con la que se aparta de la musicalidad característica del Modernismo. Utiliza con frecuencia los símbolos, como, por ejemplo, el mar que simboliza la vida, la soledad, el gozo, el eterno tiempo presente. Se inicia asimismo una evolución espiritual que lo lleva a buscar la trascendencia. Pertenecen a esta segunda etapa Diario de un poeta recién casado (1916), Eternidades (1917) y La Estación total (1923-1936).

- Etapa suficiente (1936-1958): representada por dos obras fundamentales en su poesía, Animal de fondo (1949, donde muestra su obsesión por la perfección formal y por la idea de eternidad, y Dios deseado y deseante (1957) donde el poeta llega incluso a identificarse con ese dios que tanto ha buscado. Un dios que existe dentro -Dios deseante- y fuera de él -Dios deseado-.




6. Antonio Machado.

Nace en Sevilla en 1875. Aunque su obra se inicia dentro de la corriente modernista, sin embargo su evolución le lleva a una preocupación sincera por los problemas sociales de España, lo que permite su incorporación, como miembro tardío, a la Generación del 98. Fue catedrático de francés en varios institutos de España. Muere en Collioure (Francia) en febrero de 1939, tras una penosa huída -era firme partidario de la República- ante la inminente victoria del ejército de Franco.

Su poesía ha quedado recogida en tres libros: Soledades, Galerías y otros poemas (1907), incluido dentro del modernismo simbolista, Campos de Castilla (1912) donde el protagonista es el paisaje castellano y en el que dedica varias composiciones a su mujer, Leonor, muerta de tuberculosis apenas dos años después de su matrimonio, hecho que marcará su carácter con una persistente melancolía, y Nuevas canciones (1924), escrito en Baeza, donde reaparecen los paisajes sorianos que tanto le recuerdan a Leonor.

El estilo de Machado se caracteriza por la presencia constante de los símbolos; así por ejemplo, la tarde, que representa su estado de ánimo melancólico, o el agua, reflejo de su obsesión por el paso inexorable del tiempo. Pocas veces una poesía en principio aparentemente sencilla ha alcanzado cotas tan altas de hondura humana.


7. La Generación del 98.

La Generación del 98 es el nombre con el que se ha agrupado tradicionalmente a un grupo de escritores españoles que se vieron profundamente afectados por la crisis moral, política y social acarreada por la derrota militar en la guerra entre España y Estados Unidos, cuyo resultado fue la pérdida en 1898 de Cuba, Puerto Rico y Filipinas, las últimas colonias españolas. Todos los autores englobados en esta generación nacen entre 1864 y 1875.

Pertenecen a esta generación escritores como Miguel de Unamuno, Ángel Ganivet, Ramón del Valle-Inclán, Jacinto Benavente, Pío Baroja, Azorín y los hermanos Machado, además de otros escritores menos señalados como los hermanos Álvarez Quintero, Ramiro de Maeztu o Francisco Villaespesa.

Hay quienes han puesto en duda la existencia de la Generación del 98. Sin embargo, estos escritores cumplen una serie de requisitos que permiten hablar de la existencia de una generación literaria. Estos requisitos son:

- proximidad en el año de nacimiento: todos nacen entre 1864 (Unamuno) y 1875 (Antonio Machado).
- poseen una formación intelectual semejante: aunque todos proceden de la clase burguesa, adoptan sin embargo una actitud antiburguesa en su primera etapa.
- la presencia de un líder: todos señalan a Unamuno como el guía intelectual del grupo; reciben además la influencia de filósofos como Nietzsche y Schopenhauer.
- mantienen estrechas relaciones personales: asisten en Madrid a las mismas tertulias literarias; visitan juntos la tumba de Larra, con quien se identifican en su preocupación por los problemas de España; participan en el homenaje a Baroja por la publicación de Camino de perfección (1902).
- y literariamente todos se alejan del movimiento anterior, el Realismo (Galdós, Clarín, Blasco Ibáñez), al que consideran desgastado y caduco; cultivan una Literatura caracterizada por la sobriedad y la concisión, que se opone al retoricismo realista que mostraba un lenguaje hinchado y frecuentemente vacío.

Por otro lado, si el Modernismo era un movimiento fundamentalmente poético, los escritores del 98 eligen la novela y el ensayo como los géneros literarios idóneos para expresar sus preocupaciones morales y estéticas.

Dos son los temas que tratarán con más insistencia: la situación decadente de España y la preocupación existencial.

El tema de España: el llamado desastre del 98 pone en evidencia la decadencia internacional de España, que deja de ser una gran potencia. Se pierde definitivamente el antiguo Imperio Español. Este hecho provocará que estos escritores comiencen a preguntarse por las causas de la decadencia y sientan la necesidad de una regeneración nacional. Castilla, presente en las obras de Unamuno, Azorín, Baroja y Antonio Machado, se convierte en el símbolo que mejor representa los valores esenciales de la tradición española. El tema de la preocupación por España ha sido frecuente en la Literatura Española: lo encontramos en Quevedo, en Cadalso o en Larra.

La preocupación existencial: muchos de los protagonistas de las novelas de los escritores del 98 reflejan una honda preocupación por el sentido de la existencia; esta preocupación les lleva con frecuencia a un sentimiento de angustia y a plantearse problemas religiosos. Así sucede en Andrés Hurtado, el protagonista de El árbol de la ciencia de Baroja, o en Don Manuel, el párroco protagonista de San Manuel Bueno, mártir de Unamuno.


8. Miguel de Unamuno.

Nació en Bilbao en 1864. Fue catedrático de griego en la Universidad de Salamanca, y uno de los intelectuales más prestigiosos de la España de comienzos del siglo XX. Estuvo desterrado en Fuerteventura por su oposición abierta al la Dictadura de Primo de Rivera. Murió en Salamanca en 1936.

Unamuno cultivó todos los géneros literarios, sobresaliendo en el ensayo y la novela.
Los ensayos. En los ensayos su reflexión se mueve en torno a dos temas: la preocupación por España y el sentido de la vida.

La preocupación por España aparece en En torno al casticismo (1895), Vida de Don Quijote y Sancho (1905), y Por tierras de Portugal y España (1911). Unamuno evolucionará desde un deseo de modernizar el país –europeizar España- a la postura contraria –españolizar Europa-, ya que el progreso no es la solución al principal problema del hombre. Piensa, por otro lado, que la verdadera realidad histórica no se encuentra en los grandes acontecimientos, sino en lo que él denomina intrahistoria, que define como “la vida silenciosa de los millones de hombres sin historia que…van a sus campos a proseguir la oscura y silenciosa labor cotidiana. Esa vida intrahistórica es la sustancia del progreso, la verdadera tradición.” (En torno al casticismo).

El sentido de la vida es el tema de La agonía del cristianismo (1931) y de Del sentimiento trágico de la vida (1913). Unamuno piensa que el principal problema con el que se encuentra el hombre es hallar el sentido de la existencia, y dicho sentido está unido al problema de la existencia de Dios. Llega a decir: “si el alma no es inmortal, nada vale nada, ni hay esfuerzo que merezca la pena”. La fe le anima a creer en la existencia de Dios; sin embargo, no podemos demostrar su existencia mediante la razón. De ahí la agonía que experimenta el escritor ante la idea de Dios.

Las novelas desarrollan los mismos temas que sus ensayos. En ellas Unamuno se centra en el conflicto existencial que sufren sus personajes. Sus novelas siguen un planteamiento personal muy distinto a las que se escribían en su época; por esa razón Unamuno las llama nivolas. La primera, Paz en la guerra (1897), se sitúa en el marco de la tercera guerra carlista, que el escritor vivió en su ciudad, Bilbao. Le siguen Amor y pedagogía (1902), sobre los errores en la educación; Niebla (1914), cuyo protagonista, Augusto Sánchez vive la angustia existencial; La Tía Tula (1921), sobre el anhelo de maternidad; y una de sus mejores novelas, San Manuel Bueno, mártir (1933), que narra el conflicto religioso que sufre el párroco de una pequeña aldea castellana.


9. Pío Baroja.

Pío Baroja y Nessi nació en San Sebastián en 1872. Estudió Medicina en Madrid y Valencia; ejerció como médico pocos años, pues la profesión no le gustaba. Regentó en Madrid una panadería de una tía suya, pero el éxito que obtiene con sus primeras novelas le anima a dedicarse por entero a la Literatura. Su obra es muy amplia, ya que se dedicó a escribir hasta poco antes de su muerte en Madrid en 1956. Aunque lo mejor de su narrativa es la que se escribe entre 1902 y la Guerra Civil. Fue elegido miembro de la Real Academia de la Lengua en 1934.

Muchas de sus novelas fueron agrupadas por el escritor en trilogías -que son grupos de tres novelas- en base a su temática; destacan entre ellas:

- sobre la tierra vasca: La casa de Aitzgorri (1900), El mayorazgo de Labraz (1903) y Zalacaín el aventurero(1909), protagonizada esta última por un aventurero carlista.
- La lucha por la vida: formada por La busca (1904), Mala hierba (1904) y Aurora Roja (1905).
- La raza está formada por El árbol de la ciencia (1911), La dama errante (1908) y La ciudad de la niebla (1909).
- El mar: Las inquietudes de Shanti Andía (1911); El laberinto de las sirenas (1923); Los pilotos de altura (1931); La estrella del capitán Chimista (1930).

Entre 1913 y 1935 aparecieron los 22 volúmenes de una larga novela histórica, Memorias de un hombre de acción, basada en la vida de un antepasado suyo, un aventurero liberal y masón llamado Eugenio de Aviraneta (1792-1872), a través del cual refleja los acontecimientos más importantes de la historia española del siglo XIX.
En los últimos años de su vida escribió ocho volúmenes de memorias bajo el título de Desde la última vuelta del camino.


10. Azorín.

José Martínez Ruiz, más conocido por el seudónimo de “Azorín”, nació en Monóvar (Alicante) en 1873. Estudió Derecho en Madrid, pero se dedicó al periodismo y a la literatura. En 1924 ingresó en la Real Academia Española de la Lengua. Muere en Madrid en 1967.

Dentro de su obra literaria sobresalen las novelas y los ensayos. Entre sus novelas destacan las que escribe en su juventud: La voluntad (1902), Antonio Azorín (1903), de cuyo protagonista toma el seudónimo, y Las confesiones de un pequeño filósofo (1904); en ellas predominan los elementos autobiográficos y utiliza un estilo impresionista caracterizado por los pequeños detalles.

Como ensayista dedicó especial atención a dos temas: el paisaje español y las obras literarias clásicas. Así en Castilla (1912) su objetivo es profundizar en la tradición cultural española. En La Andalucía Trágica el autor describe las injusticias sociales en el campo andaluz. Entre los ensayos literarios de Azorín destacan Ruta de Don Quijote (1905), Clásicos y modernos (1913), Los valores literarios (1914) y Al margen de los clásicos (1915). En ellos, su intención no es la de hacer un estudio pormenorizado de las obras literarias, sino expresar sus impresiones y reflexiones personales sobre la literatura española.



11. Valle-Inclán.

Su verdadero nombre era Ramón Valle Peña, y nació en Villanueva de Arosa (Pontevedra) en 1866. Comenzó la carrera de Derecho pero no la acabó, y emigró a Méjico en busca de fortuna. Cuando regresa a Madrid vive como un auténtico bohemio. Durante toda su vida, dedicada enteramente a la Literatura, pasó dificultades económicas. Sólo al final, en 1933, las cosas mejoraron notablemente, ya que fue nombrado director de la Academia Española en Roma. Murió en Santiago de Compostela en 1936.
         Entre 1902 y 1905 publica las Sonatas, cuatro novelas que dedica a cada una de las estaciones del año –Sonata de primavera, Sonata de estío, Sonata de otoño y Sonata de invierno-, en las que narra las aventuras amorosas del marqués de Bradomín, a quien Valle describe como “un don Juan feo, católico y sentimental”. Las Sonatas son la mejor muestra de la prosa modernista española. Más adelante se centra en el teatro y publica las  Comedias bárbaras, formadas por la trilogía Águila de blasón (1907), Romance de lobos (1908) y Cara de plata (1922). Las Comedias están ambientadas en el mundo rural gallego, caracterizado por la violencia y las pasiones.
         Valle-Inclán vuelve a la novela con una trilogía sobre La Guerra Carlista (1908-1909), compuesta por Los cruzados de la causa, El resplandor de la hoguera y Gerifaltes de antaño. Su literatura se mueve todavía dentro del estilo modernista. Sin embargo, a partir de 1920 su obra da un giro absolutamente personal apartándose de todas las corrientes literarias; comienza entonces la etapa esperpéntica del escritor, que duraría hasta el final. Un esperpento es algo feo, absurdo y ridículo. Valle utilizará esta palabra para referirse a la deformación de la realidad social española. Los personajes de sus obras dramáticas aparecerán deformados, caricaturizados, convertidos en marionetas. La obra clave del esperpento es Luces de bohemia (1920); su protagonista, un poeta ciego llamado Max Estrella, acompañado por su lazarillo don Latino de Hispalis, nos dará una visión desgarrada de la España de comienzos de siglo.
         Valle escribió también una novela esperpéntica, Tirano Banderas (1926), considerada como una de sus obras maestras; en ella traza la figura despiadada de un dictador hispanoamericano.
         Valle-Inclán es considerado como uno de los mejores dramaturgos del siglo XX. Su asombroso dominio de la lengua lo convierte en uno de los grandes creadores de nuestro idioma.